Nueva pedagogía de luz y ritmo: aplicación de los fosfenos y la neurosincronización al estudio
Resumir todas las posibilidades de aplicación pedagógica de la luz y el ritmo, de los fosfenos y la neurosincronización, en una nueva pedagogía de luz y ritmo es, como poco, atrevido, las posibilidades son infinitas y si se quiere una comprensión global, al menos de algunas de ellas es imperativo acudir a unos de nuestros coach que por todo el mundo imparten nuestros curso de luz natural fosfenos en los que se dedica un espacio importante a la nueva pedagogía de luz y ritmo.
Pero dicho esto los principios fundamentales de la nueva pedagogía basada en la luz y el ritmo sería los siguientes:
El lugar de estudio debe estar muy bien iluminado, la luz debe incidir en la mesa, en los libros, en los apuntes etc. de forma directa, próxima y potente. La razón es lo que damos en llamar fosfenos por reflexión de la luz, la luz polarizada. Entiendo que en los artículos de los señores de la luz las evidencias históricas de que el hombre ha observado siempre fijamente un punto de luz, son abrumadoras, pero podríamos hacerlas extensibles a la observación de la luz polarizada, al reflejo de la luz, es decir, cuando se observa la luna, esa luz es una luz reflejada, cuando se mira el cielo, o el reflejo del sol en el agua en muchas iniciaciones etc. lo que se está haciendo es generar fosfenos mediante la reflexión de luz y son fosfenos muy a tener en cuenta en la nueva pedagogía de luz y ritmo. Esos fosfenos son más adecuados para los trabajos, diríamos más conscientes, pero a la vez producen una estimulación cerebral excepcional, de modo que cuando el libro, los apuntes etc. están muy bien iluminados, la luz reflejada incide en nuestra pineal y provoca una gran estimulación, produce fosfenos por reflexión de la luz y son capitales en la aplicación de la luz y el ritmo en nueva pedagogía.
Hagamos un ensayo. Si en vez de mirar la lámpara fosfénica miramos el reflejo de su luz, por ejemplo, sobre una hoja de papel en blanco colocada muy próxima a la lámpara, pasado un minuto más o menos, podremos observar al cerrar los ojos, un fosfeno con la forma del papel sobre el que proyectamos la luz de la lámpara. Hemos hecho un fosfeno por reflexión de la luz.
Así cuando el niño estudia con el texto muy bien iluminado está de forma inconsciente, trabajando con fosfenos por reflexión de la luz, es decir, con una estimulación neuronal muy importante.
Para conseguir una reflexión perfecta es ideal utilizar una bombilla de luz natural como las que incorporamos en la lámpara del Dr. Lefebure 2008® y que manda fabricar Dr. Lefebure Methods® a tal efecto, pues es una luz natural perfecta para la polarización. Entonces, lo que debemos hacer es o bien colocar la bombilla A08 en una lámpara convencional o bien utilizar la lámpara del Dr. Lefebure 2008® de forma que su luz incida sobre el texto y además nos permita hacer fosfenos con facilidad. Así pues la polarización de la luz es muy importante en la nueva pedagogía de luz y ritmo.
El siguiente paso es comenzar el estudio realizando un fosfeno, para ello es imprescindible la lámpara fosfénica ya sea la de bolsillo o la lámpara del Dr. Lefebure 2008®.
Miramos la lámpara fosfénica treinta segundos si es la de bolsillo y cuarenta si es la lámpara del Dr. Lefebure 2008®, en ese momento el fosfeno se ha activado, es decir, está actuando como un excepcional dinamizador neuronal.
El estudiante no tiene más que leer su lección con la normalidad habitual proyectando el fosfeno sobre el texto, a ese fosfeno le llamamos fosfeno por proyección. Segundo elemento capital en la nueva pedagogía de luz y ritmo.
Es interesante observar que si apagamos la lámpara o la bombilla que hemos dispuesto para iluminar el texto y así generar fosfenos por reflexión de la luz, veremos el fosfeno por proyección algunos segundos sobre el texto, en forma de una mancha circular; al encender de nuevo la iluminación del texto, desaparece, de modo que además de beneficiarnos del fosfeno por la reflexión de la luz éste nos ayuda a que el fosfeno por proyección no entorpezca la lectura. Hasta este momento el estudiante no ha invertido más que treinta segundos en mirar la lámpara fosfénica el resto es un proceder habitual de su dinámica de estudio, el caso es que con treinta segundos está provocando una ebullición cerebral que se dirige a una mejor comprensión del texto. Es muy frecuente que el estudiante describa una mayor concentración desde el primer fosfeno y que la sensación de leer sin comprender desaparezca.
La vida del fosfeno es de tres minutos pero eso no significa que cada tres minutos de deba mirar la luz, cuando se preste, cuando le parezca bien al estudiante, pasados siete, diez, doce minutos, pero que no transcurra media hora, pues es una lastima desperdiciar el tirón que el fosfeno ofrece, miraremos de nuevo la lámpara para generar otro fosfeno continuando el estudio y así sucesivamente, cuantos más fosfenos se hagan más concentración se tendrá, más claridad en el pensamiento más rapidez mental, este es un punto importante, sin generar estrés, el alumno debe tener presente, de vez en cuando, mirar la luz, hacer fosfenos, cuantos más mejor. La luz proyectada del fosfeno y los fosfenos creados por la reflexión de la luz coexisten pues en la nueva pedagogía de luz y ritmo.
Ni que decir tiene que si ese proceso de enorme estimulación mediante la luz llevada a lo más profundo de nuestro cerebro, cohabita con la estimulación por el baile neuronal producido por la neurosincronización de los hemisferios cerebrales, los resultados son exponenciales. En el apartado de aplicación pedagógica de la APP de Dr. Lefebure Methods® existen tres ritmos para el estudio, el que facilita la memorización, el de la voluntad y el de la lectura, eso significa que colocamos a nuestro cerebro en una situación óptima, para esos procesos mediante unos ritmos específicos muy estudiados y que producen un estado mental concreto y adecuado para obtener esos resultados.
Realmente la sesión de estudio toma otra dimensión debido a que en ese momento incorporamos los dos elementos luz y ritmo en la nueva pedagogía, es decir, las bases de vida estimulando nuestro cerebro.
En el proceso de estudio de la nueva pedagogía de luz y ritmo una cosa es la lectura y la comprensión y otra muy distinta es la memorización. En el momento de memorizar cada estudiante utiliza una técnica distinta, hay quien subraya el texto, otros lo repiten en voz alta hasta que lo memorizan, otros se levantan y pasean recitando el texto etc. El caso es que es un momento en el que se detiene el proceso de lectura y comprensión y se centra todo el esfuerzo en memorizar. Con el fosfeno nada cambia, no hay que hacer nada distinto ni invertir más tiempo, solo que se memoriza con la luz. Una vez el estudiante tiene claro el texto que debe grabar en su memoria observará la lámpara fosfénica en una observación fija de su luz repitiendo el texto, la fórmula, el concepto etc. luego cerrará los ojos y se colocará un antifaz que se facilita al efecto, en ese momento procederá como habitualmente repitiendo el texto, la fórmula etc. Si la técnica de estudio fuera subrayar y verbalizar se hará con los ojos abiertos como de costumbre, pero con el fosfeno. Lo que se pretende es que coexistan el fosfeno y el proceso de memorización para que la energía de la luz pase al pensamiento asociado amplificándolo, densificándolo, fecundándolo, grabándolo literalmente en la memoria. También es sumamente importante que si existen dudas en el proceso de memorización se comience de nuevo, pues el proceso es tan poderoso que grabaríamos las dudas.
Cuando el estudiante tiene claro que lo ha memorizado continuará con la lectura por proyección y por reflexión.
Cuando el texto a memorizar es largo no hay más que leerlo con fosfenos por proyección y por reflexión, de por si la comprensión será muchísimo mayor que la habitual así como la retención de las ideas clave que subrayaremos; luego con esas ideas, supongamos que siete, haremos un esquema o un mapa mental y con ellas crearemos una historia disparatada, imposible y divertida, para luego mezclarla en un fosfeno, cerrando los ojos y rememorando la historia. De este modo el texto largo fluirá en el examen al haberlo leído primero con fosfenos por proyección y por reflexión y después haber grabado el esquema de lo más importante en un fosfeno con los ojos cerrados.
Existen muchísimas más herramientas en la nueva pedagogía de luz y ritmo de cómo utilizar los fosfenos y sus diversas formas, por ejemplo, el cofosfeno, pero este artículo pretende ser una aproximación estimulante de lo sencillo y poderoso del método y no una exhaustiva descripción que dejamos para los cursos de nuestros coach que además están diseñados para la transmisión lúdica y plástica del maravilloso mundo de la luz.
Quisiera hacer una mención a las herramientas bio-inteligentes descritas en el libro Pedagogía 3000 de Noemí Paymal, un libro de una nueva y vanguardista pedagogía, sinergia pedagógica que tiene al niño en su eje mirándolo con los ojos del aprendizaje y de la conciencia, proporcionando un enfoque integral y afectivo basado en los nuevos paradigmas del tercer milenio.
Por herramientas bio-inteligentes Paymal entiende las técnicas holísticas integradoras de la mente, el físico, la emoción y el espíritu, las describe como alternativas, complementarias, naturales, flexibles, incluyentes y que involucran al alumno/a. No solo se entienden como herramientas de enseñanza si no que también son técnicas que contribuyen a la salud integral.
La herramientas bio-inteligentes para el sistema educativo que se describen se valoran muy positivamente porque:
Estimulan las inteligencias múltiples
Algo intrínseco a la utilización de fosfenos.
Conectan y armonizan los dos hemisferios cerebrales
Ese precisamente, es el trabajo de la neurosincronización.
Desarrollan la inteligencia emocional
El equilibrio emocional es obvio e inherente a los fosfenos y es algo palpable desde las primeras sesiones, incluso desde el primer fosfeno.
Desbloquean los canales energéticos, físicos y sutiles
La relación de Ajna el chakra del entrecejo con el fosfeno es directa, parte del trabajo de Dr. Lefebure Methods® precisamente es ese desbloqueo mediante la luz y el ritmo; en cuanto al desbloqueo físico baste mencionar la utilización del fosfeno en la osteopatía y en la terapia craneosacral entre otras.
Abren y activan los centros energéticos del cuerpo humano
Dr. Lefebure Methods® ha descubierto lo que se podría definir como unos ecos neurológicos, los fenos, que son los homólogos sutiles de los sentidos, sus equivalentes conscientes, la información que estos fenos nos ofrecen es un mezcla de la emoción implicada en el sentido, de su percepción cognitiva y de su percepción sutil; en un feno sentimos y vivimos los tres mundos unidos en una espléndida destilación de la información que los sentidos nos ofrecen.
En presencia de los fenos, los ecos neurológicos desencadenados se expanden en ondas hacia diferentes áreas cerebrales que desarrollan siempre unas constantes que se reproducen en todos ellos, conseguimos: ser más rápidos mentalmente y memorizar mejor, depurar, equilibrar, controlar y sanar nuestras emociones y conectarnos con nuestro yo superior entrando en la conciencia primigenia, todo ello sea cual sea el feno implicado, pero con unas características específicas para cada uno de ellos.
Armonizan y equilibran los campos electromagnéticos
Mediante el fosfeno podemos cambiar en tres minutos nuestro campo bioeléctrico y equilibrar nuestros campos electromagnéticos hasta tal punto que es posible medir esa incidencia de la luz con aparatos conectados a personas no avisadas de que se les proyecta, como en los fosfenos por proyección en el estudio, un fosfeno.
Conectan a las fuerzas telúrico-cósmicas y otras fuentes de energía y de conocimiento
Un importantísimo campo de actuación de Dr. Lefebure Methods® es la naturofosfenología que mediante ejercicios muy pragmáticos y poderosos de luz y de ritmo, bases de todas las iniciaciones ancestrales, nos permite armonizarnos con la naturaleza y así conectarnos con el alma de la Tierra y entre otras capacidades poder percibir lo que los taoístas llamaban las venas del dragón.
Reactivan la memoria celular y los códigos genéticos latentes
La doctora Esther del Rio descubrió que el agua del cuerpo humano está compuesta por clatratos que permiten que la luz, es decir, la información y la memoria celular se transmita de forma casi inmediata por todo el cuerpo formando moléculas de cristal líquido que se relacionan con una res magnética distribuida por todo el cuerpo. Es evidente la importancia de Dr. Lefebure Methods® en la sincronización de las células nerviosas mediante el pensamiento rítmico y la luz interior del fosfeno en ese proceso de información y memoria biofotónica.{simpleproduct:id=96}
Se basan en procesos de autoenseñanza y autosanación
Quizás sea uno de los principales problemas de la difusión de Dr. Lefebure Methods®; cuando se lleva la luz a lo más profundo de nuestra mente y de nuestro espíritu, la autonomía, la capacidad y la conciencia personal de accesibilidad consciente y pragmática a cualquier problema personal de salud o de reto social es tal, que ya no caben muletas ni victimismos y en ocasiones, esas situación da verdadero vértigo al practicante, porque la necesitad constante de apoyos exteriores se derrite ante la certeza del poder personal de autocrecer y autosanar.
No voy a extenderme en cada una de las herramientas bio-inteligentes que luego pasa a descubrir Noemí Paymal pero absolutamente en cada una de ellas miles de terapeutas o de profesionales de la educación están aplicando el fosfeno de forma regular como potenciador y dinamizador de las mismas, en cada una de ellas.
La ciencia de los fosfenos descubierta por el Dr. Lefebure es una ciencia que permite desdoblar los sentidos y que consiste en desencadenar reacciones de los ritmos profundos del cerebro y del sistema nervioso, mediante estímulos muy específicos, por ejemplo, en el caso del sentido de la vista se crea su equivalente sutil mediante la observación fija de una luz especial que produce, pasados treinta segundos, una imagen interior de luz que algunas culturas han relacionado tradicionalmente con al glándula pineal, así pues este elemento sutil, el fosfeno, es el otro lado del espejo desde donde podemos ver, nuestros procesos fisiológicos más profundos y reveladores. El sistema fénico descubierto por Dr. Lefebure Methods® conecta la luz natural, la luz que vemos con la luz interior, desdoblándola e integrando los dos mundos el físico y el sutil de modo que coherentemente, podemos pasar de uno a otro con autonomía y control produciendo con su simbiosis una enorme estimulación de todo nuestro ser.
El cambio en el estudiante que utiliza los fosfenos es global, es total, cambia su energía e incluso la de su entorno, mejora en todas las facetas de su vida no solo en su rendimiento escolar y eso sucede de un modo sencillo y natural.
Todo es mucho más sencillo de lo que parece, a los niños de los hombres les gusta jugar a girar y mirar el sol, cuando esos niños se hacen hombres juegan a crear religiones e iniciaciones con la pretensión de que el hombre se haga dios, olvidando que dios juega como un niño haciendo girar la luz del universo, quizás el viaje no valió la pena y todo acabó cuando se inició, con los niños mirando la luz y jugando a girar.
La revolución pedagógica siempre ha estado delante nuestro; nosotros sabemos como convertir la energía de la luz en energía mental, equilibrio emocional y conciencia sutil, nosotros sabemos producir un rítmico baile neuronal para multiplicar exponencialmente todas nuestras capacidades. Nosotros sabemos escuchar el lenguaje del universo de luz y de ritmo y destilarlo en una esencia que es capaz de cambiar nuestras vidas.