Las experiencias de Kundalini y la sexualidad están estrechamente relacionadas. La kundalini es conocida en muchos lugares como la serpiente de iniciación. Por consiguiente, se manifiesta en danzas en las que la columna ondula como una serpiente, es decir, imitando una sinusoide. Según el lamaísmo, el hombre aparece de la luz que engendra un huevo y esos hombres carecían de impulsos sexuales.
Las experiencias de kundalini sólo son posibles si el poder de la serpiente se dirige hacia la luz tras romper el huevo. Como resultado, sube por la columna hasta alcanzar el cielo. En cambio, cuando la energía de la serpiente se pierde sin sublimar, no es posible el éxtasis espiritual.
La energía sexual del kundalini en cada uno de nosotros es una gran reserva de fuerzas ilimitadas. Una pareja de mosquitos taparía todo el Universo con su descendencia, si se la pudiera alimentar hasta la saciedad. La constante en todas las técnicas poderosas para despertar kundalini y vivir las experiencias de kundalini, es invertir el proceso. Es decir, en vez de dirigir toda esa energía inmensa hacia la perpetuación de la especie, orientarla al cielo.
El celibato de los sacerdotes o la abstinencia de los yoguis son algunos ejemplos. Ciertamente, se busca convertir la energía sexual del kundalini en catapulta hacía Dios. Como resultado, la energía pasa a enfocarse del plano horizontal al vertical.
Es la razón por la que las concepciones indoiranias unen espíritu, luz y semen. Es decir, la serpiente, lo terreno y caótico, lucha por volver al paraíso del que cayó. En el Libro tibetano de la muerte, el lama facilita la salida del alma del difunto por la coronilla. Es más, guía al moribundo antes y después de la muerte, hacia la comunión con la luz.
Testimonios del Despertar Kundalini
Existen numerosos testimonios de personas que han experimentado el despertar de la energía Kundalini, describiendo esta experiencia como un proceso transformador a nivel físico, mental, emocional y espiritual. Quienes han pasado por esta vivencia suelen relatar sensaciones profundas que van desde un calor intenso que recorre la columna vertebral hasta la sensación de expansión de la conciencia y la conexión con lo divino.
Algunos testimonios coinciden en que el despertar Kundalini no es un proceso instantáneo, sino más bien gradual, en el que el cuerpo y la mente deben ajustarse a la potente energía que se va liberando. Muchos de estos individuos han señalado que, a medida que la energía asciende, se sienten más conscientes de sus emociones y patrones de comportamiento, y cómo estos afectan su vida cotidiana. En muchos casos, el despertar de Kundalini trae consigo un cambio radical en la percepción de la vida y en la conexión con la espiritualidad.
Asimismo, en términos de sexualidad, hay relatos donde los individuos experimentan una transformación de la energía sexual hacia una manifestación espiritual, lo que resulta en una mayor sensibilidad y apertura a la energía vital. Estas experiencias confirman la relación entre la sexualidad y el despertar espiritual, tal como se describe en las enseñanzas de Kundalini. Los testimonios subrayan que canalizar correctamente la energía sexual puede ser clave para un despertar Kundalini profundo y pleno.
Energía kundalini y sexualidad: La sublime fuerza de la vida y la transformación de la energía sexual en energía espiritual
Asimismo, el movimiento de las experiencias de kundalini del yoga hindú, se presenta generalmente como serpenteante pero mental. Por lo tanto, una luz imaginaria sigue el trayecto de la energía. Por ello, los textos antiguos, sostienen que kundalini reposa como una serpiente de luz enrollada. Adormecida en el chakra basal, en el interior de un huevo situado en medio del perineo. En una versión egipcia de la creación, del huevo primigenio surge el pájaro de luz. Siempre la luz…
En las experiencias de kundalini se guía la serpiente con luz y ritmo. Como consecuencia de ello se crea un canal energético que permita el tránsito de la tierra al cielo. En definitiva, las experiencias de kundalini son un viaje sutil hacia la consciencia original.
La sexualidad es la base de la vida pues es del acto sexual del que nace. Es la responsable de la transformación del joven en hombre momento clave en todas las culturas. Asimismo, por la transformación de la actividad sexual en energía mental se llega, al contacto con lo divino, con Dios. Es decir, de ella parte la espiritualidad. Las experiencias de kundalini se producen tras convertir la energía sexual en energía espiritual. La eyaculación es al mundo físico, lo que la subida de kundalini al espíritu. En cambio, una no puede existir sin la otra.
Despertar de la serpiente y constantes transculturales
Todas las experiencias de kundalini están ligadas a unas conexiones neurológicas específicas en ciertas áreas del cerebro. El mismo orgasmo, por ejemplo, se produce en el cerebro. La experiencia del despertar de kundalini es un proceso mental de éxtasis, de trascendencia y de conciencia. La experiencia mística se produce por unas nuevas redes neurológicas que se obtienen mediante luz y ritmo. De esta forma, el cerebro bañado con luz y con un ritmo constante, puede producir la experiencia espiritual.
Por ejemplo, la luz interior del fosfeno que aparece tras observar fijamente un punto luminoso adecuado. Sin embargo, en el despertar de la serpiente kundalini, la luz interior debe girar. Es decir, un fosfeno en rotación, pues la fuerza original en todas las cosas, tiene una estructura en torbellino. En realidad, absolutamente todo, una nebulosa, o la sangre en el corazón, la rotación es el origen. El universo gira y el poder de la serpiente gira con él.
Así mismo, en las experiencias iniciáticas más poderosas, se ha utilizado un ritmo específico. Si percutimos un tambor, recubierto de un fino polvo, según el ritmo del golpe crearemos diversas figuras geométricas. Es decir, el ritmo estructura coherentemente el polvo. Si nuestro pensamiento toma ritmo con una dirección específica, despertar a la serpiente, la experiencia se hace sublime. Además, obviamente, todo ello en presencia de la luz giratoria. Toda enseñanza iniciática o religiosa se sustenta en dos bases. La observación de una fuente luminosa y la práctica del pensamiento rítmico. Después de eso, se produce el despertar espiritual o cambio de conciencia.
Ejercicios de luz y ritmo en las experiencias iniciáticas
Por ejemplo, rezar de forma ininterrumpida tras mirar el sol naciente y luego proyectar el fosfeno en el ombligo. De esta forma, practicaban los hesicastas del monte Athos el despertar espiritual. Pero, esta técnica, fue utilizada por lo menos mil años antes por los padres del desierto, cenobitas del monte Sinaí. Decían que gozaban de la luz increada, y por ello fueron como no, atacados. Inmediatamente un monje llamado Barlaam se encargó de ello. Pero en el Concilio de Constantinopla, Gregorio Palamás, que sabía de lo que hablaba pues pasó veinte años en el monte Athos, los defendió. Palamás demostró que en la Biblia hay innumerables menciones a la luz, la luz divina, relacionada con Dios. Además, se empeño en demostrar que la gracia se podía distinguir por la manifestación de la luz increada. Es por ello que, entre los padres del desierto, el éxtasis se producía irradiando la luz de la gracia. Para Palamás, la luz es Dios y no tiene tiempo ni espacio: el que participa en la energía divina se convierte él mismo, de alguna manera, en luz; es unido a la luz y, mediante la luz, ve en plena conciencia todo lo que permanece escondido a aquellos que no han tenido esta gracia.
Del mismo modo, en el caso de los hesicastas del monte Athos, convergen los dos elementos fundamentales: la luz y el ritmo. Para resumir, el sol y la oración rítmica.
Ciertamente, fundamentales en todas las iniciaciones y religiones del planeta. Por lo tanto, y obviamente, irrenunciables en las experiencias de kundalini. Consecuentemente, mediante la luz y el ritmo, nuevas redes neuronales específicas se crean para obtener las experiencias de kundalini.
Formación iniciática para las experiencias de kundalini
El torrente de kundalini se abre paso a través de la columna atravesando los principales chakras. Los siete chakras se alinean cuando el torrente de la energía kundalini brota con una fuerza y un impulso fantástico. Entonces, los chakras de armonizan desde la base de la columna vertebral a la parte más alta de la cabeza. Los chakras son estaciones de transbordo de la energía hasta entonces agazapada, el poder de la serpiente dormida. Es decir, son tránsitos para llegar a la luz increada y a las experiencias de kundalini.
Sin embargo, es imprescindible una técnica precisa para conseguir ese objetivo. El trabajo de Dr. Lefebure Methods®, es explicar los ejercicios iniciáticos claramente. Consecuentemente, para generar así las experiencias de kundalini de manera reproducible y concreta. En otras palabras, que lo alumnos puedan vivir la experiencia, de forma totalmente independiente. Además, en un tiempo muy corto.
La polución psicológica y energética de la vida cotidiana, las tensiones y el estrés crean bloqueos. Como resultado, lo que deberían ser caminos francos para la energía kundalini se convierten en obstáculos. Sin embargo, es posible actuar enérgicamente para despertar el poder de la serpiente. Por ejemplo, con experiencias dirigidas que se ofrecen en los cursos de kundalini de Fosfenismo. En definitiva, son verdaderas iniciaciones que permiten que la energía limpie todo lo indeseable y se abra paso. Después de eso, la energía encuentra su lugar de origen en comunión con el espíritu.
En los cursos de kundalini que ofrece Dr. Lefebure Methods las experiencias de kundalini se producen de un modo consciente. En la escuela de luz del Fosfenismo se ofrece un empujón en forma de experiencia. Además, claro está, de la técnica para reproducirlo y amplificarlo personalmente tras el curso.
La energía sexual es la base de la vida y su transformación en energía espiritual es fundamental en las experiencias de Kundalini. El despertar de la serpiente Kundalini ocurre cuando se dirige esta energía hacia el plano espiritual en lugar de la perpetuación de la especie.
La sexualidad es la base de la vida y, al transformarse en energía mental, se convierte en el punto de contacto con lo divino. La espiritualidad parte de la energía sexual y las experiencias de Kundalini se producen cuando esta energía es convertida en energía espiritual.
El despertar de Kundalini a través de la sexualidad requiere invertir el proceso habitual de la energía sexual, orientándola hacia la espiritualidad en lugar de la mera satisfacción física. Al canalizar esta energía hacia lo espiritual, se potencia el despertar de Kundalini y se abren las puertas a experiencias más profundas.
