Nagual tolteca, Nagualismo, y Fosfenismo. Carlos Castaneda fue autor de varios libros sobre ejercicios chamánicos toltecas. Su obra es controvertida, pero lo que nos interesa es la visión fosfénica de su trabajo. Es decir, la utilización de las técnicas chamánicas a la luz de los trabajos del Fosfenismo.
El nahual Don Juan Matus, busca provocar estados alterados de conciencia mediante plantas que utilizan los chamanes. En el chamanismo nagual tolteca, las platas de poder son habituales. Sobre todo, es importante situar Carlos Castaneda en el ambiente transgresor de los setenta. El nagualismo encajaba perfectamente en la contracultura de la época.
En El Segundo anillo de poder, Castaneda describe unas técnicas chamánicas que le ha enseñado su maestro nagual. Carlos Castaneda practica los ejercicios chamánicos con cuatro alumnos también en el sendero del chamán.
El objetivo es preparar una jornada intensa de trabajo, es decir, acumular energía. La fuente de poder por excelencia es el sol, dador de fuerza y dinamismo. Los iniciados a las técnicas chamánicas del chamanismo nagual tolteca entornan los ojos. Además, ejecutan un pequeño balanceo de cabeza. Miran el sol con el ojo izquierdo, luego vuelven a la posición inicial protegiéndose ese lado con un sombrero. La operación se repite durante una media hora. Es una de las técnicas chamánicas recurrentes dentro del viaje chamánico tolteca.
Relación de la simbología del chamanismo nagual tolteca y el Fosfenismo
La iniciación chamánica nagual descrita, es sencillamente, un fosfeno con balanceo lateral, además, con ritmo. En contraste, con el Fosfenismo podemos entender el ejercicio sin toda la liturgia ceremonial del nagualismo. Sin duda, además, sin los caprichos típicos del chamán, en este caso del nagual tolteca.
Al mirar una fuente de luz y cerrar los ojos aparece una luz interior que denominamos fosfeno. El fosfeno pulsa, vibra, gira, se eclipsa etcétera, además, de cambiar de colores durante aproximadamente tres minutos. Todo ello se relaciona con el cerebro, el corazón y el espíritu del sujeto que realiza la experiencia. En definitiva, el fosfeno es una manifestación de su psiquismo.
Por lo tanto, no es extraño que un ejercicio típico del nagualismo, impregnado de técnicas chamánicas ancestrales utilice el fosfeno. Probablemente, esté oculto entre una maraña de tradiciones, supersticiones y símbolos chamánicos, pero es un fosfeno. Aún más, acompañado de un balanceo y de un ritmo interhemisférico.
El Fosfenismo lleva años explicando los balanceos de cabeza de la tradición iniciática javanesa practicados por Pak Subud. El estudio científico del Dr. Lefebure mediante un electroencefalograma, estableció que eran una constante histórica. Los balanceos están directamente relacionados con los ritmos de los fosfenos, nuestra luz interior.
Las técnicas chamánicas del nagualismo mezclan el masaje cerebral del balanceo con el fosfeno, en una danza fisiológica perfecta.
Don Juan Matus, el nagualismo y las prácticas chamánicas
Por lo tanto, es coherente que el maestro nagual especialista en las técnicas chamánicas toltecas, utilice la observación del sol. Aún más, balanceando rítmicamente la cabeza para generar energía. Profundicemos un poco más en el ejercicio descrito por Carlos Castaneda. El hemisferio izquierdo, se especializa en un comportamiento matemático, analítico y temporal enlazado al ojo derecho. El derecho en la compresión no verbal, la atemporalidad y la emoción, se vincula al ojo izquierdo. Es decir, el derecho predomina en el nagualismo. Por tanto, en las técnicas chamánicas del chamanismo nagual tolteca.
También en el libro El Segundo anillo de poder, Castaneda charla con las hermanitas, iniciadas de Don Juan Matus. El tema, las plantas que utilizan los chamanes, plantas de poder. Es interesante, la relación entre el nagualismo y el Fosfenismo:
La Gorda explicó que las plantas de poder habían sido utilizadas sólo por antiguos maestros… Eran una cosa tan poderosa, que necesitaban por parte del brujo atención impecable… Añadió que la gente completa no necesitaba plantas de poder. Sin embargo, cuando llevaran a la perfección, las utilizarían para obtener un empujón definitivo y total…
El nagual me ha dicho que esas plantas de poder han reunido el aspecto amenazador de vuestra «segunda atención»… Me ha dicho que es lo que les ocurre a los hechiceros cuando se les dan plantas de poder… Las plantas de poder distorsionan su «segunda atención» …
Me dijo que en lo sucesivo debíais cambiar de dirección y reunir la «segunda atención»… Es decir, de otra manera, más como nosotros. El sueño es el único medio de reunir la «segunda atención». Además, sin herirla, sin hacerla amenazadora y terrible…
Curso de chamanismo de Fosfenismo, técnicas chamánicas
Las plantas que utilizan los chamanes, el peyote en este caso, permiten dar el salto. Don Juan Matus abre las puertas de la búsqueda de la visión, pero con consecuencias físicas. En consecuencia, no se pueden dirigir las experiencias chamánicas. Como resultado, aparecen aspectos amenazadores y salvajes. En contraste, con el control de la ensoñación que ofrecen las técnicas chamánicas fosfénicas.
En el curso de chamanismo de Fosfenismo se utilizan ejercicios iniciáticos extremadamente poderosos. Las experiencias son fantásticas y transformadoras. Es decir, con coherencia y autonomía, se producen estados alterados de conciencia.
Cuando se comprenden las técnicas chamánicas,sin gurú, ni plantas, llega la excelencia. En definitiva, el Fosfenismo, nos guía con coherencia a experiencias que cambian nuestra vida.
El nagualismo, el chamanismo nagual tolteca, capaz de encontrar el animal de poder, utiliza las técnicas fosfénicas. El brujo tolteca se transforma en su álter ego. Finalmente, en el curso de chamanismo de Fosfenismo puedes vivir esas experiencias con seguridad y reproductividad.
La iniciación al chamanismo es, en definitiva, una iniciación fosfénica.
